Positivas han sido las valoraciones de la Comisión Europea por el Programa de Estabilidad de España con una previsión del mantenimiento de un superávit fiscal del 1,2% y la reducción de la deuda hasta en un 30% en el 2010, teniendo en cuenta además la desaceleración económica existente. Es evidente que son dos condiciones muy importantes, elevado superávit y menor deuda pública, para afrontar los problemas que puedan suponer una bajada de los ingresos tributarios debidos al ajuste que sufre actualmente el sector inmobiliario.
Joaquín Almunia es el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios y señala que se felicita al Estado español por el mantenimiento de objetivos ambiciosos, a pesar de la desaceleración o ralentización del crecimiento económico, además se ha mostrado convencido de que España podrá mantener sus objetivos al afirmar que la situación presupuestaria de España de "muy positiva, la mejor de la zona euro".
La Comisión Europea también ha ofrecido recomendaciones y sugerencias para España. Ha recomendado potenciar todavía más la sostenibilidad a largo plazo de la hacienda pública poniendo en marcha medidas para contrarrestar las futuras consecuencias del envejecimiento de la población en los programas de gastos. La Comisión también ha sugerido que España debe tender a un nuevo modelo de crecimiento en el que no tenga tanto peso la construcción, sino más en las inversiones en investigación y desarrollo.