Tokio es una gran ciudad que ha experimentado un gran crecimiento desde la Segunda Guerra Mundial. Es el mayor centro financiero del mundo y la segunda ciudad más cara para vivir en ella.
Tokio es la capital de Japón. Se encuentra situada en la isla de Honshu, en la región de Kanto. Constituye el centro económico, educativo comunicativo, político y cultural de Japón, además de contener la mayor cantidad de instituciones financieras, sedes corporativas, museos, universidades, colegios, teatros, centros comerciales y de ocio de todo el país. Tokio constituye un gran centro financiero en el mundo. En la capital japonesa se encuentran las sedes principales de grandes compañías. Tokio se encuentra subdividida en 23 barrios, 26 ciudades, un distrito compuesto por tres pueblos, una villa y cuatro subprefecturas. El centro de Tokio es el que contiene los 23 barrios, y es el conocido como ciudad de Tokio. Tokio ha sufrido importantes desastres naturales y otros provocados por el hombre. Por ejemplo el gran terremoto de Kanto atizó fuertemente a Tokio en 1923. Después de la catástrofe se puso en marcha un plan de reconstrucción que no pudo ser completado por sus altos costes. En la segunda Guerra Mundial la ciudad fue fuertemente bombardeada, sobreviviendo finalmente sólo la mitad de la población. A pesar de su trágico pasado, Tokio fue una ciudad que experimentó un importante progreso económico, milagro económico se le llamó, en las décadas 50 y 60, años en los que el gobierno de Japón priorizó la infraestructura y la industria manufacturera. Tokio también cayó desafortunadamente en la explosión de una burbuja inmobiliaria. La burbuja se generó a partir de 1986 y eclosionó en 1990, cayendo en una recesión de una década, a la que se le bautizó con el nombre de década perdida.
Cuenta con dos aeropuertos de carácter internacional: el que se encuentra situado en la prefectura de Chiba, centrado principalmente en vuelos internacionales, conocido como Narita, inagurado en 1978 y que tiene la ventaja de que tiene conexión a través del tren Narita Express con la ciudad. También cuenta con el Aeropuerto Internacional de Tokio, que se ocupa principalmente de vuelos locales.
La manera más habitual para viajar es el metro y su red ferroviaria. Se trata de la red más amplia del mundo. La ciudad también dispone de autobuses urbanos.
Para vivir en ella, la segunda ciudad más cara del mundo es Tokio, según señala la encuesta del Economist Intelligence Unit. El informe tiene en cuenta una serie de factores que son los que llevan a determinar que ciudades son las más caras. La encuesta realiza una comparación de la vivienda, la alimentación, el vestido, el transporte y lo que cuestan los servicios públicos. Se trata de costes de productos y servicios que inevitablemente se tiene que utilizar si se quiere vivir en determinada ciudad.
Tokio acapara la mayor economía en una ciudad en el mundo. Tiene un producto interior bruto (PIB) de 1.315 billones de dólares, lo que se traduce en que se trata de la segunda potencia económica del mundo. Cuenta con un gran centro internacional de finanzas donde se encuentran las sedes centrales de muchas importantes empresas, compañías, aseguradoras y bancos. Es el principal centro financiero de Asia. Compañías japonesas como Sony, Toshiba, Toyota (la automotriz mayor del mundo), Hitachi, crean sus productos en Tokio para ser exportados en su mayoría a otros países. Otra de las principales industrias de la ciudad es la prensa y por supuesto la mayoría de empresas de prensa y publicación japonesas se encuentran en Tokio. También destacan las industrias de teléfonos móviles, maderera, petroquímica, fabricación de automóviles. También se encuentran los centros industriales de Yokohama y Kawasaki, productoras de navíos, de productos petroquímicos, automóviles y productos de acero y hierro.
Al ayuntamiento de Tokio se le ha llamado la torre de los impuestos, por su elevado coste. Tras la Segunda Guerra Mundial, muchas compañías trasladaron sus sedes centrales a Tokio con el fin de conseguir relaciones más ventajosas. Esta es una importante circunstancia que llevo ha hacer crecer la población en la ciudad y a subir el costo de vida por vivir en ella.
En un viaje a Tokio no hay que dejar de visitar la Torre de Tokio, el mayor monumento del mundo fabricado con hierro. Tiene 332,6 metros de altura, es decir, algo superior a la Torre Eiffel, (la Torre Eiffel mide 324 metros) en la que se inspiró la Takenaka Corporation para crear la Torre de Tokio. Tiene un peso de 4.000 toneladas con un precio de 2,8 billones de yenes.
Otros lugares de interés que deben ser visitados entre otros muchos en Tokio son: el parque de los Edificios (Tatemono-en), con replicas de edificaciones tradicionales; la catedral Nicholai, primera catedral ortodoxa de Japón; el palacio Imperial, el complejo Rompongi Hills con comercios, cines y la Torre Mori; Kyu-Iwasaki Tei Tei-en, que es el palacete de la familia Iwasaki conocidos por ser los fundadores Mitsubishi Corp; los Jardines de Koishikawa Korakuen; el estadio de béisbol Tokio Dome; los Jardines del Este del Palacio Imperial como segundo círculo de defensa del castillo Edo. El Palacio Imperial fue en otra época el castillo de Edo, y sigue estando rodeado por el auténtico foso. A la entrada principal conduce el puente Nijusbashi, de doble arco.
También resulta una visión nocturna espectacular el puente Rainbow Bridge, el puente del Arco iris, puente colgante en la parte norte de la bahía de Tokio. Une el puerto de Shibaura con la isla artificial Odaiba. Recuerda por su estructura al Golden Gate de San Francisco. Tiene una extensión de 570 metros. Tiene unas lámparas que dan luz en la noche al puente gracias a energía solar, cubriendo de color rojo, verde y blanco al puente.
Como museos destacan el Metropolitano de la fotografía y el de Arte Idemitsu. Como lugares de ocio se encuentran el Toky Dysney y el Acuario de Shinagawa.